La población de ciudad, a raíz del desastre, empezó a rendir homenaje a la Virgen de las Mercedes o Santísima Tragedia, con la esperanza de que ella proteja a la ciudad de nuevas erupciones. De esta manera se habría iniciado la celebración, como una ofrenda religiosa por medio de la cual el pueblo manifiesta su fe y su cultura a través de actos sacramentales y de la música, danza, poesía, comedía y artesanía.
No hay comentarios:
Publicar un comentario